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¡FUERA ESTRÉS! Una de las posibles causas de tu subida de peso.

by in Consejos, Te interesa 28 de octubre de 2022

¿Te ha pasado que intentas bajar de peso, sigues todas las pautas de alimentación al pie de la letra, haces deporte, y no notas una mejoría clara? ¿Sientes que tú no bajas de peso al ritmo que deberías? ¿La báscula no refleja todos tus esfuerzos por adelgazar? ¡Cuidado! Puede que estés sufriendo estrés y esta sea la causa de por qué no bajas de peso de la manera esperada.

Muchas veces, cuando estamos en pleno momento de estrés, no nos damos cuenta del impacto que esto tiene en nuestra vida, precisamente porque aquello que nos estresa, acapara toda nuestra atención y no nos detenemos a mirar las consecuencias que nos acarrea, hasta que son muy notorias, o ha pasado el tiempo y con distancia lo vemos más claro.

Está comprobado que el estrés engorda. No se trata sólo de QUÉ COMEMOS, sino también CÓMO LO COMEMOS. El estado desde el que comemos es fundamental. Como ya hemos comentado, las emociones influyen en nuestra alimentación y si estas son negativas, traerá mala repercusión a nuestros hábitos nutricionales. Comer con ansiedad, con enfado, con rabia, con nervios… es algo que el cuerpo recibe y se desajusta.

Cuando estamos estresados, el cuerpo se pone en situación de alarma o emergencia, y aumenta en nosotros la producción de cortisol. El cortisol es una hormona que afecta a casi todos los órganos y es conocida como «la hormona del estrés». Se ha comprobado que si el cortisol sube, nuestro cuerpo reacciona pidiéndonos comidas «de recompensa», alimentos ricos en grasas y azúcares de baja calidad.

Por tanto, resulta fundamental cuando afrontamos una dieta, proponernos mantener bien nivelado nuestro cortisol y hacer que nuestro estrés no se dispare. Pero… ¿cómo podemos hacerlo?

  • En primer lugar, proporcionándonos un buen descanso. El sueño de calidad ayuda a rebajar los niveles de cortisol.
  • Manteniendo bien niveladas la vitaminas responsables del sistema nervioso. Mejorando los niveles de vitamina B6, B12, ácido fólico… estaremos ayudando a reducir ese estrés.
  • Si el cortisol es una hormona, la parte buena es que hay otra hormona que la contrarresta, y esta es la oxitocina. Nos causa sensaciones placenteras y de disfrute. Por tanto, hemos de procurar estimular la producción y liberación de oxitocina y la buena noticia es que podemos hacerlo de manera natural, por ejemplo, podemos incluir en nuestra alimentación productos ricos en vitamina C, como las fresas, las naranjas, el limón o el brócoli, por ejemplo.
  • Haciendo más cosas que nos gusten, que nos hagan disfrutar: deporte, tiempo para uno mismo, meditación, pasar tiempo con nuestros seres queridos, etc.

Ya sabes, si crees que estás haciendo todo bien y no consigues bajar el peso que deseas, recuerda que tu cuerpo es un conjunto de TODO y que a veces debes poner atención en cómo estás por dentro, y no solo por fuera. Cambia estrés por placer, cortisol por oxitocina, y afronta el cambio de dentro para fuera.