La dieta

¿En qué consiste?

En limitar únicamente el aporte de aquellos nutrientes responsables del sobrepeso y garantizar un aporte óptimo de aquellos nutrientes indispensables para el buen funcionamiento del organismo.

¿Cuáles son las ventajas?

Normoproteica

Es una dieta normoproteica. Aseguramos un correcto aporte de proteínas al organismo para no perder masa muscular, sin aportarla en exceso, que es una característica de las hiperproteicas.

800 kcal/día

Nuestra dieta es un modelo médico, dietético personalizado, dirigido a personas con sobrepeso y obesidad, cuyo objetivo consiste en alcanzar el IMC (índice de masa corporal) correcto y en una reeducación alimentaria que nos ayude a mantener el peso en el tiempo.

Personalizada

Una dieta de muy bajo aporte cálorico, aporta menos de 800 Kcal/día en sus fases más activas, junto con suplementación nutricional adaptada al método, para evitar carencias.

Rápida

Se puede perder entre 6 – 10 kilos al mes en fase estricta y reducer el volume de los tejidos grasos. Es más rápida en hombres que en mujeres, porque no influye el ciclo hormonal femenino. La fase estricta de alto rendimiento adelgazante se utiliza poco tiempo, aunque depende del nivel de sobrepeso.

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¿Para quién está indicado?

Para personas que sufren problemas de sobrepeso y obesidad que necesiten perder peso y mantenerlo a largo plazo.

Personas que no hayan tenido éxito con otras dietas o que han sufrido el efecto rebote tras finalizarlas.

En todos los casos, será el especialista, una vez examinado el paciente, el que determinará la idoneidad del tratamiento.

¿Cómo funciona?

Se reduce al mínimo el consumo de grasas (lípidos) e hidratos de carbono (glúcidos), al tiempo que se mantiene un aporte óptimo de proteínas de ahí el nombre de la dieta… de alto valor biológico.

El papel de las proteínas es crucial para el mantenimiento de una buena salud, ya que entre otras cosas, protegen la tonicidad, elasticidad y vitalidad de la piel, los músculos y los huesos (pues son el principal constituyente de la masa magra), aportan energía, defienden frente a agresiones externas e internas, contribuyen a la regulación del metabolismo, etc.

Ello confiere a la Dieta de aporte Proteico una eficacia inigualable en materia de pérdida de peso, pero evitando el temido efecto “rebote” o “yo­-yo” que se produce con la mayoría de dietas. En efecto, debido a que una parte del peso perdido en esas dietas no es grasa sino músculo, ése peso es inmediatamente recuperado al reanudar una alimentación normal.

Por último, mientras que la mayoría de dietas son lentas y provocan sensación de hambre, compulsiones y ansiedad, con esta dieta se activa un proceso llamado “cetogénesis”, aquello que nuestras abuelas llamaban acertadamente “tener acetona”, que presenta una gran ventaja desde un punto de vista terapéutico: los cuerpos cetónicos generan un marcado efecto de saciedad y producen el 75% de la energía requerida por el organismo. El resultado es una sensación de vitalidad que facilita la observación de la dieta.

Por su rigor e impacto sobre el organismo, la Dieta Proteica debe ser controlada por un profesional específicamente formado. Consulta a tu especialista para que te informe sobre la modalidad más adecuada a tus necesidades y ritmo de vida.